Sobre mí
Si la curiosidad por saber algo «sobre mí» te ha traído hasta aquí te seré sincera: no voy a hablar sobre mí.
Prefiero que lo hagan las fotos que he capturado y las palabras que he escrito. Soy capaz de saber qué estaba haciendo, pensando y sintiendo en cada una de ellas. Ahí están y estaban, vigilando mis pasos de mujer, mis silencios hechos relato, mis locuras de anarquista fotográfica. Barcelona es la estrella principal, sin olvidar Sicilia, Madrid, Valencia, Mexico, La Rioja, Bilbao, Noruega y otras geografías inconfesables. Veo -e intuyo- rostros conocidos y amados pero también un buen puñado de soledades robadas, de historias anónimas que han llenado mi colección de vampiro con tintes de diógenes sentimental.
Siempre he intentado ser respetuosa con esos robos, cumpliendo un código de honor que les humaniza y protege su intimidad. Porque tengo debilidad por los relatos de perdedores que en realidad son héroes, titanes.
Sobre las fotografías que encontrarás aquí, hay una infinidad de mediciones desde la sombra y también una constante búsqueda de la Luz. He aprendido que al hacer fotos (como en la vida) hay que tomar una obligatoria distancia mínima para que el enfoque sea el adecuado. Que cuando usas un gran angular te exige una generosidad incluyente: ser y estar con la mayor honestidad que seas capaz. También que no siempre es fácil componer, que se sufre exponiendo, sobrexponiendo, subexponiendo, que necesitas ISO’s propias y ajenas, incluyendo algunas que se te pueden hacer sólidas en la sangre. Hay mucho blanco y negro porque lo he sentido como mi zona de confort pero también necesarias explosiones de color.
Dicho todo eso (y si aún sigues leyendo) dejo claro que no me considero fotógrafa. Mi máximo respeto por los que sí lo son, de los que aprendo y a los que admiro profundamente su técnica, su forma de capturar el mundo. Yo sólo hago fotos, principalmente de aquellas imágenes que me inspiran historias. Hay aquí un buen puñado de ellas. Las siento mías aunque en realidad ya no lo son.
De esta página importan las historias y lo que provocan en ti al leerlas.
Lo de menos es la biografía de quien las ha escrito.
Así que hazlas un poco tuyas.
Barcelona,
Enero de 2017
